La herramienta, impulsada por el Colegio de Gestores Administrativos, permite a cualquier persona conceder autorización a un gestor para hacer gestiones en su nombre sin la necesidad de firma manuscrita
Ante la situación excepcional que ha generado la pandemia de COVID-19, los gestores administrativos han volcado sus esfuerzos en la búsqueda de fórmulas para que sus clientes puedan seguir cumpliendo con la Administración sin salir de casa y, por tanto, evitando los desplazamientos. Hoy, el Colegio de Gestores Administrativos de Málaga ha empezado los primeros ensayos para implantar el «mandato electrónico», que permite a cualquier persona conceder una autorización a un gestor sin requerir de firmas manuscritas, de forma que éste pueda realizar trámites en su nombre. Hace unos meses que el colectivo gestaba este proyecto, pero le ha dado celeridad para ponerlo en marcha cuanto antes dadas las circunstancias. Tras las pruebas piloto que han empezado hoy, se espera que la semana que viene esta nueva herramienta funcione con normalidad.
Gracias a este mandato electrónico, el cliente concede su autorización al gestor administrativo sin necesidad de firmas manuscritas y así no necesita acudir ni a las oficinas de la Administración ni a las gestorías administrativas. Se trata de una herramienta muy sencilla, pero «fundamental para seguir trabajando en esta situación tan atípica de confinamiento», comenta el presidente del Colegio, Daniel Quijada.
Trámites con la DGT
En una primera fase, este ‘e-mandato’ va a estar dirigido a trámites de Tráfico, para en un siguiente paso del proyecto ampliar el uso de esta tecnología a más documentos y gestiones. «La idea es hacerlo extensivo a otras materias, como laboral o fiscal para dar la respuesta adecuada, por ejemplo, a la campaña de la Renta porque aún no sabemos cuánto tiempo durará esta situación y este documento permite que sigamos trabajando con cierta normalidad dentro de la anormalidad que vivimos», añade Quijada.
El proceso es sencillo. Se puede firmar sobre una tableta digitalizadora homologada o incluso introducir un código único de verificación que se le envía al cliente por SMS a su teléfono móvil. En ambos casos, toda la información relacionada con el proceso de firma es encriptada, almacenada y certificada por el Consejo Andaluz de Colegios de Gestores Administrativos, pasando a formar parte del documento.
En primer lugar, el documento es cumplimentado por la gestoría administrativa; el cliente firma el documento a través de su teléfono móvil y el gestor administrativo acepta el mandato, firmándolo con su certificado digital cualificado y remitiéndoselo por correo electrónico al ciudadano.
Se trata de una aplicación «muy útil», en opinión de Quijada, ya que permite prescindir de uno de los pocos documentos en formato papel que todavía existen para llevar a cabo trámites con la Dirección General de Tráfico, algo que supone una gran ventaja para el ciudadano, porque le evita desplazamientos, molestias y pérdidas de tiempo, y también para los propios gestores administrativos, porque según marca la Encomienda de Gestión, la gestoría estaba obligada a archivar físicamente el documento en papel durante seis años. Además, dota de seguridad jurídica las relaciones entre los gestores administrativos con sus clientes y ante la Administración.